fibromialgia

Definición – La FM (de fibro=fibra, mi=músculos y algia=dolor) es un síndrome de origen médicamente desconocido.

  • Es una Enfermedad crónica, pero no degenerativa.
  • Evoluciona en brotes, por lo que se pasa por etapas mejores y peores.
  • No existe un tratamiento alopático; solo se mitigan los síntomas.

Se considera crónica si tiene más de 6 meses de duración. El dolor y el  cansancio son los síntomas más destacados pero no los únicos. También alteraciones del sueño, colon irritable, pérdida de memoria y de concentración… son los más destacados.

Es difícil de diagnosticar y sus síntomas pueden indicar otra enfermedad. Esto crea incertidumbre, angustia y tensión en quienes los padecen.

Afecta a los tejidos blandos del cuerpo: tendones, ligamentos, músculos, y es más frecuente en mujeres adultas.

Estadisticas

La prevalencia es del 90% de mujeres respecto a los varones, entre los 35 a 65 años. Es más frecuente en mujeres trabajadoras y contribuye al estrés relacionado con el empleo y la vida doméstica.

En Estados Unidos las cifras de afectados oscilan entre los 4 y 10 millones y:

*         10-20 % de las consultas en Reumatología

*         80-90 % de los casos son mujeres de 30-60 años.

*         Raro en edad infantil y mayores de 65 años

*         causa más frecuente de dolor musculo-esquelético crónico difuso

En México se estima que afecta al menos al 4% de las mujeres (2.4 millones)

Síntomas

  • Dolor: La severidad varía de intensidad y lugar, siendo más severo en las partes del cuerpo más utilizadas, y puede llegar a interferir con la vida.
  • Agotamiento: También es muy variable; va desde un ligero cansancio, hasta el agotamiento.
  • Anquilosamiento o rigidez: Fundamentalmente al levantarse o después de sentarse durante un largo periodo o estar de pie sin moverse. Puede empeorar por la temperatura o la humedad del ambiente.
  • Dolores de cabeza o de cara: Generalmente por músculos del cuello o de hombros anquilosados o sensibles, que transmiten el dolor. Una tercera parte de los afectados tienen una disfunción de la articulación de las mandíbulas y sus músculos.
  • Trastornos del sueño: Aunque duerman las horas suficientes, pueden levantarse cansados. Pueden tener dificultad para conciliar el sueño o mantenerse dormidos.
  • Trastornos cognoscitivos: Dificultad para concentrarse, lentitud mental, lapsos de memoria, dificultad para recordar nombres, palabras o no sentirse capaz de tener que enfrentarse con varias cosas que hacer a la vez.
  • Malestar abdominal: Trastornos digestivos, dolores abdominales, meteorismo, estreñimiento y/o diarrea.
  • Problemas genitourinarios: Aumento en la frecuencia o mayor urgencia para orinar, sin existencia de infección de la vejiga. Algunos pueden padecer cistitis intersticial (inflamación dolorosa de la pared de la vejiga).
  • Los períodos menstruales pueden ser más dolorosos.
  • Se pueden presentar dolores en la región de la vulva o dolores durante el coito.
  • Parestesia: Se trata de un entumecimiento u hormigueo.
  • Puntos miofasciales hipersensibles: En este “síndrome del dolor miofascial” (MPS) se forman unos puntos muy dolorosos, distribuidos en bandas encogidas en los músculos u otros tejidos conectivos. Además transmiten el dolor a otras partes del cuerpo. Es típica la localización en el cuello, los hombros o en la cintura.

Síntomas del tórax

  • Costocodralgia: dolor muscular en la unión de las costillas con el esternón.
  • Mayor susceptibilidad al prolapso de la válvula mitral del corazón que se hincha durante el latido y causa un chasquido o soplo.

Otros

  • Desequilibrio
  • Sensaciones en las piernas
  • Síndrome de piernas inquietas: impulso incontrolable de mover las piernas, sobre todo cuando se está descansando.
  • Hipersensibilidad sensorial /síntomas alérgicos
  • Hipersensibilidad a la luz, sonidos y olores.
  • Reacciones parecidas a las alérgicas a una variedad de sustancias, que se acompaña de comezón o sarpullido.
  • Problemas de la piel
  • Prurito, resequedad o manchas
  • Depresión y ansiedad

Diagnóstico

No se puede diagnosticar mediante pruebas de laboratorio, de radiografías, o análisis de sangre ni de biopsias musculares.

Se realiza mediante criterios desarrollados por el Colegio Americano De Reumatología en 1990:

1.- Dolor crónico, generalizado, musculo esquelético, por más de 3 meses en cada uno de los 4 cuadrantes del cuerpo

2.- Ausencia de otra enfermedad sistémica que pueda ser la causa del dolor.

3.- Múltiples puntos sensibles al dolor en sitios característicos. Existen 18 puntos sensibles. Para que un paciente se pueda considerar con Fibromialgia debe tener 11 de estos 18 puntos (ver diagrama).

Fibromialgia y psicología

El paciente tiene una forma de afrontar la vida de manera que contribuye a aumentar el dolor:

  • Son personas que “se sienten burros de carga” de sus hogares, de sus trabajos…
  • Son personas muy dadas a satisfacer las necesidades de los demás antes que las propias, llegando al punto que ya no saben cuáles son sus propias necesidades.
  • Se sienten incomprendidas, y se sienten heridas con quienes las rodean.
  • Tienen un gran sentido del deber y eso las lleva a ser muy exigentes y a tener un gran sentimiento de culpabilidad.
  • Baja autoestima.
  • Les cuesta pedir.
  • Mucha rigidez: física (el cuerpo muy tenso), mental (dan muchas vueltas sobre lo mismo, y les cuesta considerar otros puntos de vista), y emocional (siempre que pueden evitan afrontar lo que sienten).

Esta forma de relacionarse consigo mismas y con su entorno les reporta una gran pérdida de energía física, ya que esa tensión se va acumulando en su cuerpo.

El dolor provoca mucha agresividad y ansiedad por la sensación de impotencia, aunque con técnicas de relajación y respiración disminuye.

Las emociones como la rabia y la tristeza (sentirse incomprendidas, impotentes, no ayudadas, etc.) aumentan los síntomas de: dolor corporal, insomnio, estrés… y a la larga, la pérdida de concentración y la memoria.

Se van acumulando temas pendientes en vez de resolverlos, y todo ello provoca sentimientos de culpabilidad e irritabilidad, hacia ellas mismas (“debo hacer y no puedo”) y hacia los otros (“deben hacer y no hacen”).

Técnicas psicológicas

Del 20% al 80% de pacientes ha presentado depresión

Del 20% al 60% han presentado ansiedad

Relajación y respiración. Para conectar con su cuerpo de una forma constructiva, concentrándose en: “Yo, que tengo Fibromialgia, que me puedo dar”, en vez de lo que “el cuerpo me debería dar a mi”

Psicoterapia. Para tener una relación sana con uno mismo. Darse cuenta del papel activo que tiene uno mismo en la construcción de su propia vida.

  • Si quieres que otros cambien (actitud frecuente en la Fibromialgia) empieza a mirarte y ver cómo funcionas, ya que tiendes a hacer contigo lo mismo que ves que los otros hacen contigo (no escucharte, no hacerte caso…)
  • Aprender a crear, en vez de victimizar o acusar, (se sienten atacados y ofendidos constantemente por los demás).

Y darse cuenta:

  • De que los cambios se tienen que hacer en primera persona.
  • De la importancia de aprender a cuidar de sí mismas.
  • De la importancia de manejar las emociones sanamente, para externarlas sin herir (expresar en vez de esperar a que el otro se dé cuenta…).
  • De sus propias necesidades para poder expresarlas (decir no…).
  • De qué es lo que hacen para que las situaciones se repitan constantemente.
  • De la importancia de aprender a valorar al otro y a uno mismo