Ansiedadeinflamación

La ansiedad es una expresión de la inflamación

• La ansiedad es la respuesta fisiológica ante una amenaza que incrementa los niveles de citoquinas inflamatorias. Esto es: si se tiene inflamación, se sentirá ansiedad.

• Las citoquinas regulan diferentes tejidos, y las hay pro-inflamatorias y anti-inflamatorias. Modulan el sistema inmunológico y su función.

• Al reducir o resolver el estrés y la ansiedad, disminuyen los niveles de citoquinas inflamatorias, lo que permite una mejor función inmunológica.

• Los alimentos procesados inflaman, porque aumentan la resistencia a la insulina, lo que aumenta las citoquinas inflamatorias, ya que contienen aceites refinados ricos en Omega-6, que son pro-inflamatorios.

El Dr. David Hanscom, después de sobrevivir al C0V1D, centró su atención en la prevención y la supervivencia.

La prevención se basa en fortalecer la inmunidad, al reducir el estrés y la ansiedad, con alimentación, ejercicio y otras intervenciones. 

“El dolor es un síntoma de estrés y ansiedad, que se basa más en inflamación que en factores psicológicos”.

“Al sentirse bien, se nota un cambio en la química corporal y se pasa de la adrenalina, cortisol, histaminas y citoquinas inflamatorias , a la hormona del crecimiento, dopamina, serotonina y el gaba, que son anti-inflamatorios. Si se controla la química del dolor, el dolor desaparece”.

Citoquinas, ansiedad, dolor y mala función inmunológica

Las citoquinas son proteínas que regulan diferentes tejidos. Las hay pro-inflamatorias y anti-inflamatorias, y modulan la función del sistema inmunológico.

La ansiedad es la respuesta fisiológica ante una amenaza. Si el cuerpo está inflamado, sentirá ansiedad.

Al reducir o resolver el estrés y la ansiedad, disminuyen los niveles de citoquinas inflamatorias, lo que permite al sistema inmunológico funcionar mejor.

El Dr. Hanscom creó un grupo de trabajo que incluye al Dr. Stephen Porges, Neurocientífico del Comportamiento, y al Dr. David Clawson, experto en citoquinas.

Dr. D. Clawson: “Cada célula tiene citoquinas. Y así se comunican entre ellas. Las Amenazas activan al sistema inmunológico. Una “amenaza” es todo tipo de cosas: Virus, Bacterias, Células Cancerosas, Toxinas, una Suegra o un Jefe Difícil, pero también pensamientos y emociones, expuestos o reprimidos.

La neurociencia ha demostrado que los pensamientos y emociones se procesan en el cerebro de la misma manera que una amenaza física.

Resulta que todas las enfermedades degenerativas, pertenecen a la misma clase. Las Enfermedades Cardíacas, Vasculares, Diabetes Adulta, Obesidad, Párkinson y el Alzheimer, sólo son ejemplos de trastornos inflamatorios. Todo está relacionado con la inflamación”.

La ansiedad es un síntoma de inflamación 

Cuando el sistema nervioso autónomo se desregula, puede sentirse bien un día y tener un ataque de pánico al día siguiente.

“Resulta que la ansiedad, el trastorno bipolar, la esquizofrenia y la depresión, son procesos inflamatorios, no psicológicos. La amenaza crea una respuesta corporal, incluida la inmunitaria, y la sensación generada por la adrenalina, el cortisol y las citoquinas inflamatorias, es la de ansiedad.”

“Personalmente, fui a un psiquiatra durante 13 años y hablé tanto que empeoré. Y concluí que la mejor forma de disminuir la ansiedad es reducir la respuesta al estrés. Y se logra mediante:

• Atención plena

• Meditación

• Relajación

• Dieta anti-inflamatoria

Porque cuando se recibe una amenaza constante, las células inflamatorias comienzan a destruir al cuerpo. Y si el cuerpo está inflamado, se sentirá ansiedad”.

Los alimentos procesados causan inflamación

Los carbohidratos refinados causan resistencia a la insulina, lo que aumenta las citoquinas inflamatorias e incrementa el riesgo de contraer COVID. Los alimentos ultra procesados contienen Omega-6, que son pro-inflamatorios. 

Reducir la inflamación mejora la supervivencia del COVID-19

Eliminar la amenaza y crear una sensación de seguridad reduce los marcadores inflamatorios, elimina el dolor y mejora la capacidad del sistema inmunológico para responder correctamente a los patógenos.

“La mayoría combate el virus muy rápido, pero el factor que requiere atención, es que casi todos los que mueren por C0V1D tienen factores de riesgo, y casi todos tienen marcadores inflamatorios elevados”.

El nervio vago

El sistema nervioso simpático (consciente) se activa ante las amenazas, mientras que el sistema nervioso parasimpático (inconsciente) se activa con la relajación.

“El nervio vago afecta directamente al metabolismo, las glándulas y sus hormonas, los niveles de glucosa y las citoquinas. Una parte conecta con los músculos faciales, y del cuello, permite que los humanos socialicen analizando mutuamente sus expresiones faciales. Esto se llama Corregulación.

Pero si usamos cubre bocas no podemos vernos la cara, y quedamos aislados socialmente, y se desregula el sistema nervioso autónomo, lo que puede provocar ansiedad y hasta ataques de pánico.

Cuando el sistema inmunológico se activa por una amenaza, las personas se aíslan socialmente,lo que activa aún más el sistema inmunológico. Y como no se puede equilibrar ya que está socialmente aislado, su conducción nerviosa se duplica, siente más dolor y ocurren más de 30 síntomas físicos, como: Migraña, Tinitos, Sarpullidos, Problemas Estomacales, Dolor de Espalda y Cuello, Ardor en los Pies, entre otros.

La forma de calmar la ansiedad es reduciendo la química inflamatoria del cuerpo. ¿Cómo?: Ejercitarse en la atención plena, o en la meditación, ayuda a bajar las citoquinas. Igual ocurre con la alimentación.

Cómo activar la respuesta de relajación y reducir la inflamación

¿Cómo se activa esta respuesta vagal para provocar la relajación y reducir los marcadores inflamatorios? Hay varias estrategias:

  • Escritura expresiva.Existen más de 1000 artículos de investigación que demuestran que reduce la carga viral y los marcadores inflamatorios. Simplemente hay que escribir los pensamientos y luego romper las hojas. Si se analizan y tratan de solucionar, solo se los refuerza.
  • Sueño de calidad. Es importante dormir siete horas. “Es fundamental”.
  • Practicar el perdón. El antídoto contra la ansiedad es el control. Si pierde el control, el cuerpo segrega más hormonas de estrés y citoquinas, lo que provoca ira y ansiedad.

“Descubrieron que el 90 % de las personas con dolor crónico no han superado la situación que causó el problema, pero resulta curioso que no se hayan perdonado a ellos mismos”, dice Hanscom.

“En este proceso de curación, la ira y el personal son el punto clave. Sentir enojo significa que se está enfrentando una amenaza constante. Cada vez que se siente frustración aumentan las citoquinas inflamatorias”.

  • Ayuno intermitente. Una forma fácil es restringir el lapso de alimentación de 6 a 8 horas cada día, y no consumir alimentos 3 horas antes de acostarse. Esto reduce los marcadores inflamatorios.
  • Dieta anti-inflamatoria que no es lo mismo que una para perder peso.
  • Disminuir la sobre estimulación del sistema nervioso
  • Apagar los noticieros
  • Evitar espectáculos violentos y sobre estimulantes, especialmente por la noche, porque tan solo verlos incrementa los factores pro-inflamatorios.
  • Detener toda expresión negativa, sobre todo verbal, como Quejas, Chismorreo, Hablar de Enfermedades, Dar Consejos no pedidos, y Criticar.
  • Ejercitarse regularmente. Al menos 30 minutos diarios, de manera moderada y disfrutable.
  • Vigilar y dar seguimiento a sus problemas médicos, como controlar la diabetes y la hipertensión.
  • Atender los asuntos familiares pendientes
  • Enfocarse a mitigar los conflictos porque ese caos impacta sobre la salud de todos.
  • Ser amable, porque cualquier familiar involucrado estará en riesgo de una enfermedad crónica.
  • Divertirse es una de las formas más poderosas de estimular la producción de hormonas de relajación y anti-inflamatorias.
  • Respiración profunda, usando el diafragma como fuelle, poniendo énfasis en expulsar el aire desde el abdomen y permitiendo que el pulmón se llene solo.
  • La vida es dura
  • Una maldición de la conciencia es que sabe bien que no viviremos por siempre. Este es el miedo principal, y pasamos demasiado tiempo tratando de no pensar en ello.

La paradoja

Entre más ansiedad y frustración sintamos, más aumentará nuestra carga de amenazas y riesgos, y mayor posibilidad de desarrollar una enfermedad incapacitante y de morir prematuramente. Y en ese estado, nuestra capacidad de disfrutar la vida queda hipotecada.

Otras formas sencillas de activa el nervio vago

Para desencadenar la respuesta de relajación y reducir los marcadores inflamatorios, tenemos:

  • Ejercicios de respiración profunda Atención plena
  • Meditación Relajación
  • Cantar o Tararear Escuchar canciones de cuna
  • Un paño frío en la frente Acupuntura

“Si se tiene inflamación, se sentirá ansiedad”. Y la solución para la ansiedad, el estrés, el dolor y la salud inmunológica, es implementar estrategias que reduzcan las respuestas al estrés y que nos hagan sentir bien y disminuyan la inflamación.

Referencias

Nervio Vago

Qué es el nervio vago

Es el nervio más largo que tenemos, y está fuertemente conectado a nuestras emociones. Su  nombre viene del latín nervus vagus, porque vaga o deambula por el cuerpo.

Se origina en el tronco cerebral detrás de las orejas y se extiende por cada lado del cuello, cruza el pecho y llega hasta el abdomen.

Este nervio conecta el tronco cerebral con casi todos los órganos del cuerpo (Corazón, Pulmones, Estómago, Intestinos, Páncreas, Hígado, Riñones, Bazo y Vesícula). Es como un cable transatlántico con miles de fibras dentro.

El 80% de esos cables son sensores que a lo largo de toda su extensión van reportando al cerebro lo que pasa en todos los órganos (Kevin Tracey, Instituto Feinstein, NY, EUA, pionero del estudio de este nervio).

El nervio vago es el componente principal del Sistema Nervioso Parasimpático, que controla las funciones y actos involuntarios de nuestro cuerpo.

El Sistema Nervioso Simpático nos prepara para la acción, mientras que el Sistema Nervioso Parasimpático es como su interruptor de apagado (Psic. Wilson).

“El nervio vago cambia el modo corporal para: el Descanso, la Relajación, la Recuperación, la Regulación de la Frecuencia Cardíaca, y la Respiración, y todas las cosas divertidas necesarias para vivir”. Por ello es que esta vía de comunicación, con sensores que envían señales del cuerpo al cerebro, puede impactar directamente en nuestra mente, pensamientos y sentimientos. 

Eres lo que comes…

La evidencia dice que una dieta balanceada hace bien a la salud. Pero ¿Cómo se traduce esto en el funcionamiento de nuestro cuerpo? ¿Y qué tiene que ver el nervio vago en esto?

Hay que empezar con el microbioma, estos microorganismos, principalmente bacterias, que viven en todo el cuerpo, pero particularmente en el intestino, y que defienden al organismo contra los patógenos y bacterias invasoras. Pero también digieren parte de los alimentos y extraen algunas sustancias buenas para el cerebro, y que llegan a él mediante el nervio vago.

“Hay muchas vías de comunicación entre intestino y cerebro, pero la más estudiada e interesante es el nervio vago. Y lo que sucede en el vago afecta nuestras emociones” (John Cryan, de Anatomía y Neurociencia de la U. College Cork, Irlanda).

A diferencia del genoma, el microbioma es modificable mediante la alimentación. Y hay una serie de alimentos fermentados (Kimchi, kéfir, chucrut, yogurt, miso) que ayudan, así como hay verduras ricas en probióticos que benefician la señalización intestinal-cerebral”.

“La fibra de los vegetales, como la inulina, alimentan el microbioma que sintetiza químicos, que a su vez estimulan el nervio vago, para activar partes del cerebro que nos hacen sentir de una manera particular” (Dr. Xand van Tulleken, Made of Stronger Stuff, BBC).

Estimulación del nervio vago

Existen tratamientos que estimulan el nervio vago por razones terapéuticas, mediante un dispositivo similar a un marcapasos pero tiene un uso médico limitado para la depresión y epilepsia. “Su  activación hace que el cerebro libera neurotransmisores, que reducen la actividad convulsiva.

“Si sabemos que el nervio vago es como los frenos de un auto para detener la inflamación, hay la posibilidad de piratearlo con medicamentos para apagar la inflamación” (Kevin Tracey).

Pero enfermedades y tratamientos aparte, podemos estimular al nervio vago para bajar los niveles de ansiedad y estrés con técnicas como:

• Cantar

• Tararear

• Repetir Mantras

• Yoga

Un estudio de 2013 con coristas mostró que estas actividades ayudan a mantener el compás del ritmo cardiaco.

“El Yoga lo hace de forma muy natural. Cantar y recitar hacen vibrar la garganta y fomentan la respiración diafragmática profunda, que estimula el nervio vago” (Psic. Wilson).

Dr. Xand van Tulleken, “Made of Stronger Stuff: The Vagus nerve”.10 de agosto de 2021.BBC https://bbc.in/3HpNgyI

Kevin J. Trace, “The inflammatory reflex”. 19 de diciembre de 2002. Nature https://go.nature.com/3ZWbzvp

Kimbelry Wilson, “Whole Body Mental Health”. 19 de mayo de 2022. Onbeing.org https://bit.ly/3QZbEKI

NutriciónySaludMental

Relación entre nutrición y trastornos mentales

Relación entre nutrición y trastornos mentales

La mayoría de médicos y científicos ya reconocen que la nutrición es la base de la salud física; pero por extraño que parezca, su importancia para la salud mental les ha pasado inadvertido a muchos.

Si el cerebro – que sólo es el 2% del peso corporal – consume al menos 25% de todo el presupuesto ¿no cabe esperar que la nutrición sea más importante para la función cerebral que para el resto del cuerpo?

La investigación en la Universidad de Calgary se basa en que la deficiencia nutricional puede ocasionar trastornos mentales y de conducta.

Esta hipótesis se sustenta sobre varios hechos:

  • Se ha empobrecido el contenido nutricional de los alimentos;
  • Al tomar suplementos mejoran los síntomas mentales.

Los trastornos mentales van en aumento

Los últimos datos sugieren que algunos trastornos psiquiátricos graves, tales como el trastorno bipolar o la esquizofrenia, están aumentando. Los estudios epidemiológicos de finales del siglo XIX situaban su incidencia en 1.8 por cada mil. En EUA en los últimos veinte años, subió a 15 por cada mil.

En México, cuando vemos el número de personas con ansiedad, andamos en 27% y con depresión en 27.6%.

El impacto de las enfermedades mentales es enorme.

La depresión es un trastorno que puede ser letal. En un estudio suizo se siguió la pista a más de 400 personas que, 22 años antes, habían sido hospitalizadas por trastornos de comportamiento. La tasa de mortalidad era del 76% y las 2 causas principales de defunción fueron el suicidio y los trastornos cardiovasculares.

En México, hasta 2017, la tasa de suicidio fue de 5.2 por cada 100 mil habitantes, la 5ª causa de muerte en menores de 15 años, y en los últimos 37 años, ha aumentado un 976%. Cifras realmente alarmantes.

El contenido nutricional de los alimentos está disminuyendo

Trabajos recientes han demostrado que el contenido nutricional de nuestros alimentos está disminuyendo porque las tierras sobreexplotadas agotan muchos elementos esenciales.

¿De dónde entonces van a obtener nuestras frutas y verduras los nutrientes que nuestros cerebros y cuerpos necesitan?

La clave para una buena salud mental

Si se desea determinar la relación entre síntomas mentales y la deficiencia de nutrientes, el primer paso es evaluarlos en individuos con trastornos mentales.

Estudios de los últimos 80 años muestran que individuos con esquizofrenia tenían niveles notablemente bajos de hierro y magnesio. 

Ya existen estudios que muestran mejoría de la función mental mediante multivitaminas y minerales de amplio espectro. Estos análisis se han hecho en estudiantes “normales”, en internados de reformatorios juveniles, y en individuos con trastornos mentales.

Los resultados de la Universidad de Calgary muestran que estos suplementos ayudan a personas con trastorno bipolar, o a niños con ataques de furia e ingobernabilidad. Ayudan a personas con trastorno bipolar, o a niños con ataques de furia e ingobernabilidad.

La investigación en medicina complementaria y alternativa

¿Es la suplementación nutricional una manera “alternativa” de enfocar la salud mental?

Por lo pronto , mientras que la gente siga creyendo que la buena nutrición solo es importante para la salud física.

Dr. Bonnie Kaplan y Dr.Julia Rucklidge “Why nutrition is the foundation for mental health”. https://bit.ly/3JbK5Mh

Rebecca A. Clay, “The link between food and mental health”. Septiembre de 2017. https://bit.ly/33GUx6u

Julia Rucklidge, “Mental Health and Nutrition Research”  https://bit.ly/2KdAgzL

El bueno, el malo y el feo de los endulzantes  

El tema de los endulzantes es uno muy difícil en un país de Adictos al Azúcar, siniestrados por el Síndrome de Hipoglucemia, que nos afecta física, emocional y mentalmente y cuyo listado de síntomas parece más bien una descripción de la idiosincrasia nacional. 

Cada año nos empaquetamos entre 75 y 80 kg de endulzantes por cabeza. 

La adicción al azúcar predispone a todas las demás adicciones, legales e ilegales, y acompaña al 

infractor, al delincuente y al criminal en sus decisiones. A reserva de tocar el tema de la hipoglucemia en otra entrega, anexo una descripción de los principales actores de esta empalagosa obra.

Los buenos

Miel. Antibiótico natural, la Miel Virgen contiene residuos de vitaminas y minerales, aunque es de alto índice glicémico (IG). 

Melaza (Melado). Rico en minerales como Calcio y Hierro y bien tolerado de moderado IG. 

Jarabe de agave. De bajo IG y por la presencia de Inulina pueden usarlo los diabéticos e hipoglucémicos. 

Jarabe de maguey. De muy bajo IG y mucha Inulina; es un remedio tradicional para la diabetes. 

Sucanat. Cristales del Jugo de Caña Deshidratado, bien tolerado por hipoglucémicos, contiene nutrientes y moderado IG. 

Stevia. Originalmente en Yerba molida, ahora en polvo, sobrecitos o gotas. Derivado de una planta Amazónica, no contiene calorías y es el endulzante ideal para diabéticos, hipoglucémicos e intolerantes.

Demerara. Se obtiene un paso antes que el Mascabado, contiene Minerales que le moderan el IG. Mascabado. Con trazas de nutrientes y un paso antes de los azúcares impuros o morenos. De alto IG. 

Fructosa cristalina. No confundir con Jarabe de Alta Fructosa. Es de bajo IG y tolerado por diabéticos. No deja de ser refinada pero es una alternativa a la Sacarosa. Usar moderadamente. 

Los malos: 

Nos vendieron la idea de usar endulzantes artificiales para mantenernos esbeltos. Pero nos salió el chirrión por el palito, porque desde su aparición hay más obesidad que antes. Aquí los datos amargos de estos empalagosos ingredientes: 

Aspartame (Equal, NutraSweet).- Está en al menos 6000 alimentos, bebidas, suplementos y medicamentos. A veces disfrazado de “Fenilalanina” o “sabor artificial” o “sabor natural”. Más del 75% de quejas alimentarias recibidas por la FDA son del Aspartame, y publicó 92 reacciones adversas que incluyen: alteraciones del oído y la vista, vértigo, pérdida de memoria, depresión, irritabilidad y fatiga, y tumores cerebrales. Y cuando se calienta sobre los 30°C genera Metanol. Una persona puede ingerir con bebidas dietéticas hasta 250 mg de Metanol (32 más que el límite tóxico establecido). 

Sucralosa (Splenda).- Es un azúcar sintético clorado considerado un gran insecticida y conservador, que se sospecha afecte el metabolismo y dañe órganos internos. Relacionada con encogimiento del Timo e inflamación del Hígado. 

Sacarina (Sweet‘N Low). Prohibida en Alemania y Francia por 100 años. Derivado del petróleo y conocido carcinogénico. 

Alta Fructosa (Jarabe de Alta Fructosa). Conectada a la epidemia de obesidad, síndrome metabólico y diabetes, y principal fuente de calorías mediante bebidas y lácteos como Yogurt bebibles. Este endulzante se salta el Hígado convirtiéndose en tejido graso y elevando los triglicéridos. Bloquea la señal de saciedad induciendo a comer sin parar. 

Los feos

Azúcar blanca o sacarosa. Los estudios la relacionan con mayor riesgo de afectaciones cardiovasculares, cáncer, diabetes y más, pero la consumimos con singular entusiasmo. Suprime las defensas durante 5 horas después de ingerirla y entorpece a los glóbulos blancos. Interfiere la absorción del Complejo B y produce pérdida de minerales como Calcio y Magnesio.

Además, posee las 3 marcas de una droga: es químicamente pura, altera la conducta, y es adictiva. 

Azúcar morena o sacarosa impura. Como decía un experto: “El azúcar blanca es una persona desnuda; el azúcar morena es la misma pero con corbata”.

Vitaminas contra la violencia

Estudios llevados a cabo tanto en Gran Bretaña y Dinamarca indican que los suplementos nutricionales ayudan a reducir las agresiones físicas, los robos y otros delitos entre la población carcelaria  Administrar a jóvenes reclusos una dosis diaria de suplementos vitamínicos y minerales podría ayudar a reducir los niveles de violencia, según un estudio de la Universidad de Oxford. 

Las autoridades británicas se proponen mejorar la dieta de un millar de reclusos -algunos de ellos asesinos- en un proyecto piloto de tres años en tres prisiones del país y que financia la fundación Welcome. 

Según una investigación previa en un centro de máxima seguridad para jóvenes delincuentes en Aylesbury, Buckinghamshire, los presos que recibieron una pastilla diaria con complementos vitamínicos cometieron un 26% menos de actos de indisciplina en comparación con el resto de reclusos y un 37% menos de actos violentos. 

Además del régimen alimentario habitual, algunos jóvenes presos (entre 16 y 21 años) reciben placebos mientras que otros ingieren más de 30 vitaminas y minerales, además de una dosis de Omega-3, diariamente, que ayudan a reducir la agresión y los cambios bruscos de estado de ánimo. 

Según John Stein, neurofisiólogo de la Universidad de Oxford que dirige el estudio, esto podría aplicarse también fuera de las cárceles para tratar a todos los jóvenes proclives a la violencia y la criminalidad. 

Los ácidos Omega-3, además del zinc y las vitaminas A, B y D, tienen un papel crucial en la química del cerebro, afirma Stein, según el cual hay una relación directa entre una dieta pobre en vitaminas y minerales y el incremento de la delincuencia. 

De acuerdo con ese científico, la nutrición no es la única causa de la criminalidad, pero la sociedad ha subestimado hasta ahora su importancia como desencadenante de comportamientos impulsivos y violentos. 

Para el clínico a cargo del estudio en EUA, Joseph Hibbeln, los resultados de su prueba no son milagrosos sino lo que puede esperarse si se conoce la bioquímica del cerebro y la biofísica de las membranas de las neuronas. 

La hipótesis de Hibbeln es que las dietas modernas estarían modificando la arquitectura y funcionamiento del cerebro. 

Así como la deficiencia de vitamina C causa escorbuto, la deficiencia en las grasas esenciales que necesita el cerebro y en los nutrientes necesarios para metabolizar esas grasas, causa muchos problemas mentales, desde depresión a agresión. 

Si Hibbeln tiene razón, las consecuencias son serias. La pandemia de violencia en las sociedades occidentales estaría relacionada con lo que comemos o dejamos de comer. La “comida chatarra” no sólo nos enfermaría sino que nos pondría “de atar”. 

En este último siglo, la mayoría de los países occidentales introdujeron dramáticos cambios en su dieta y los Omega-3, esenciales para el cerebro, fueron reemplazados por los Omega-6 de aceites industriales como soya (que además bloquea el Yodo), maíz y girasol.