Comida ultra procesada y no saludable

En 1950, se estimó que el número de muertes por hambre en la Tierra era alrededor de 700 millones; y 100 millones, principalmente en países ricos, eran obesos.

Para el 2010, el hambre mundial había crecido a 800 millones, mientras que el número de obesos creció a 500 millones.

Las estimaciones indican que para el 2030, más de mil millones de personas en todo el mundo serán obesas.

Los alimentos ultra procesados, ricos en carbohidratos vacíos, son los principales factores en estas estadísticas. Dondequiera que esta alimentación se convierte en la norma, sobreviene la obesidad.

En términos generales, es mejor centrar la alimentación en alimentos enteros, evitar los azúcares refinados y alta fructosa, y aumentar las grasas saludables.

Las estadísticas han cambiado dramáticamente en las últimas 6 décadas. Como se mencionó en el documental “Globesidad: Fat’s New Frontier”, ningún país de bajo a mediano ingreso se las ha ingeniado para reducir el hambre sin causar obesidad, y muy rápidamente.

La tasa de obesidad extrema (personas con IMC superior a 40) se incrementó en un 350% en los últimos años, únicamente en los EE. UU.

Las estimaciones indican que para el 2030, más de mil millones en todo el mundo serán obesos. Como se indicó en el sitio donde se filmó el Documental Principal:

“En la India, se prevé que 100 millones de personas tendrán diabetes en un futuro próximo y en México, el mayor consumidor mundial de sodas, donde la diabetes es el asesino principal, y donde el problema de sobrepeso es muy grave, se están creando programas para ofrecer ejercicio y cirugía bariátrica.

Si se pensaba que la obesidad era un problema exclusivo de los países de primer mundo, como EE. UU., Reino Unido y Australia, este documental aclara las cosas.”

Los alimentos ultra procesados, ricos en carbohidratos, junto con la falta de ejercicio, son los factores principales que impulsan estas estadísticas. Donde se normalice una dieta de alimentos ultra procesados, la obesidad será la resultante.

Hoy en día, la mayoría de los alimentos, incluso en países en desarrollo, son ultra procesados, y llenos de azúcares, grasas procesadas dañinas y aditivos químicos. Y el vínculo más fuerte es el consumo de soda, más común en los países en desarrollo, donde las tasas de obesidad se han disparado junto con su venta.

Por eso, los mexicanos se hicieron tan obesos, ya que consumen enormes cantidades de soda, en gran parte por la falta de acceso al agua limpia y de alternativas de agua purificada de bajo costo.

 

La obesidad como precursora de muerte

Junto con el exceso de peso sobreviene una gama de otros problemas de salud. En EE. UU., 8 enfermedades relacionadas con la obesidad representan el 75% del costo de atención de salud:

– Alzheimer
– Cáncer (Mamario, de Próstata, Endometrial, de Colon, Vejiga y Renal) Enfermedades Cardiovasculares
– Diabetes 2
– Hígado Graso No Alcohólico
– Hipertensión
– Ovario Poliquístico
– Problemas Lipídicos

Ahora, 1 de cada 5 muertes en EE. UU. se relaciona con la obesidad. Y entre más joven, mayor es la influencia de la obesidad en la muerte.

Teniendo en cuenta el aumento de la obesidad infantil (33-35% de 2-19 años tienen sobrepeso u obesidad), esto se traduce en problemas graves para la calidad de vida de muchas personas.

Como se informó en The Guardian Express, los niños de hoy son un 40% más pesados en comparación con los de hace 25 años, y varios estudios relacionan el aumento de la obesidad infantil al mayor consumo de bebidas azucaradas.

La mayoría de los padres hacen todo lo posible para proteger a sus hijos de los peligros físicos, pero les dan a sus hijos alimentos dañinos sin pensar en las consecuencias futuras.

El hecho es que muchos niños de todo el mundo son criados con alimentos ultra procesados, y el resultado es idéntico en todos los países.

Como se indica en el documental, los alimentos ultra procesados son tan peligrosos para la salud como el tabaco y el alcohol. Los datos de más de 60,000 canadienses lo han confirmado, demostrando que la obesidad ya supera al tabaquismo en términos de crear una mala salud.

 

Para normalizar el peso, se debe cambiar la alimentación

Llevar un estilo de vida de sentido común es la mejor opción para lograr la salud y la longevidad, y empieza con su elección de alimentos.

Hay dos claves principales para controlar el peso:

1. Restringir severamente los carbohidratos refinados (azúcares, fructosa y harinas y granos refinados) y aumentar el consumo de grasa saludable.
2. La cantidad de proteína consumida. El Dr. Ron Rosedale cree que la mayoría de adultos necesitan 1 gramo de proteína por kilogramo de masa corporal magra al día. (Si la masa grasa corporal es del 20%, entonces la masa magra es el 80% del peso corporal total).

Pero si se comen mayores cantidades de las que el cuerpo necesita, se convertirán la mayoría de las calorías adicionales en azúcar. Además, se tendrán que eliminar los productos nitrogenados de desecho que estresan a los riñones. También es en gran parte responsable del crecimiento del cáncer.

Por último, la humanidad también tiene que regresar a la comida tradicional, como los alimentos fermentados. Casi todos los países tienen una historia de fermentar alimentos, y estos son importantes para la salud intestinal.

Alrededor del 80% del sistema inmunológico reside en el intestino y los probióticos afectan la salud en diferentes formas, y pueden influir en el control de peso.

Una alimentación saludable es la forma ideal para mantener un intestino sano, y el consumo regular de alimentos fermentados es la manera más fácil y más rentable para una óptima flora intestinal.

 

Ejercicio y ayuno intermitente

Hacer ejercicio también es importante a pesar de comer bien. Aumenta la producción de la hormona del crecimiento (HGH), esencial para una salud óptima, fuerza y vigor, y para regular el peso.

Además, el ayuno intermitente es eficaz para perder peso al mejorar la sensibilidad a la insulina y leptina. Nuestros antepasados nunca tuvieron acceso a los alimentos 24/7 y por ello nuestros cuerpos están programados para no comer por lapsos prolongados.

El ayuno también aumenta las catecolaminas y eso aumenta el gasto de energía en reposo, mientras que disminuye los niveles de insulina, lo que permite que la grasa almacenada sea quemada.

En conjunto, estos factores convertirán al cuerpo en una máquina eficiente para quemar grasa.

 

Al volante de la salud

Es importante entender que el azúcar es un factor principal que promueve la obesidad y el desarrollo de enfermedades crónicas. Muchas personas también comen poca grasa saludable, y la combinación de exceso de azúcar y muy poca grasa está impulsando las tasas de enfermedad por el techo.

  1. Top Documentary Films, Globesity
  2. Surgeon General: Overweight and Obesity
  3. American Journal of Public Health, April 5, 2013
  4. Guardian Express, August 5, 2013
  5. GreenMedInfo.com, Fructose